Cómo pintar estores

Pintar un estor es una excelente manera de renovarlo sin necesidad de reemplazarlo por uno nuevo. Esta técnica resulta especialmente útil cuando queremos dar una segunda vida a estores blancos que con el tiempo se han amarilleado o manchado, o a estores que deseamos personalizar para que encajen mejor en la decoración de la casa.

¿Qué tipo de pintura usar para pintar los estores?

El tipo de pintura más recomendable para estores depende del material del tejido:

●      Estores de tela natural (algodón o lino): Se pueden pintar con pinturas textiles que penetran en la fibra y ofrecen un acabado resistente al lavado.

●      Estores sintéticos (poliéster o mezclas): En este caso, se recomienda pintura acrílica diluida o sprays textiles, ya que se adhieren mejor y permiten un secado más uniforme.

●      Estores beige o en tonos claros: Admiten diseños más sutiles con pintura acrílica al agua, ideal para quienes buscan mantener un estilo elegante y neutro.

Además, se puede jugar con la decoración con colores para conseguir contrastes o efectos degradados que den un aire fresco a la estancia.

¿Cómo evitar que la pintura se agriete al enrollar el estor?

Uno de los problemas más comunes al pintar estores es que la pintura, una vez seca, se agriete o descascarille al enrollar el tejido. Para evitarlo, es importante seguir estas recomendaciones:

1. Diluir la pintura: No aplicar capas gruesas. Lo mejor es dar varias capas finas para que el tejido conserve flexibilidad.
2. Pintar con el estor extendido: Colócalo completamente desplegado y bien sujeto sobre una superficie plana antes de empezar a aplicar el color.
3. Dejar secar completamente: Esperar al menos 24 horas antes de enrollarlo, asegurando que no queden zonas húmedas.
4. Usar pinturas textiles o flexibles: Estas se adaptan al movimiento del tejido y evitan que aparezcan grietas.

¿Ideas de diseños y plantillas para estores personalizados?

Personalizar un estor pintado abre un abanico de posibilidades creativas. Algunas ideas que puedes aplicar fácilmente son:

●      Diseños geométricos: Líneas, triángulos o formas abstractas con colores contrastantes.

●      Motivos naturales: Hojas, flores o ramas, ideales para dar frescura a los estores blancos.

●      Plantillas de figuras: Con stencil puedes aplicar estrellas, círculos o mandalas, logrando un efecto limpio y repetitivo.

●      Detalles en bordes: Pintar solo la parte inferior o lateral del estor con un tono distinto aporta un toque moderno y minimalista.

●      Estilo degradado: Perfecto en estores beige, ya que combina tonos neutros con colores más intensos.

Estas técnicas permiten integrar los estores en la decoración de cada espacio, ya sea con un estilo sobrio, elegante o más alegre y atrevido.

¿Cómo proteger la superficie?

Una vez pintado el estor, es importante proteger la superficie para que el diseño se mantenga en buen estado durante más tiempo. Algunos consejos son:

1. Aplicar un sellador textil: En el caso de pinturas para tela, existen fijadores que ayudan a que los colores resistan la luz y el uso diario.
2. Evitar lavados agresivos: Si el estor necesita limpieza, lo ideal es usar un paño húmedo y evitar detergentes abrasivos.
3. Colocar en interiores protegidos: Los estores exteriores suelen estar más expuestos al sol y la humedad, lo que acelera el desgaste de la pintura.
4. Revisar el plegado: Enrollar siempre con cuidado, asegurándose de que no haya arrugas profundas que puedan dañar la pintura.

En el caso de estores de lino, estas medidas son aún más importantes, ya que los tejidos suelen ser más sensibles y requieren mayor cuidado para conservar el acabado decorativo.

Pintar un estor es una manera sencilla y económica de renovar cualquier estancia. Con la pintura adecuada y una buena técnica, los estores blancos, los estores beige e incluso los estores de colores pueden transformarse en piezas únicas que aportan personalidad al hogar. En nuestra tienda online, podrás encontrar estores baratos para hacer diseños personalizados que permitan adaptar tus estores a cualquier estilo, desde el más minimalista hasta el más creativo, sin gastar una gran cantidad de dinero.